Cuando uno duerme, no deja de vivir sin embargo los sentidos también descansan, es decir no estamos mirando (aunque tal vez en sueños) no estamos escuchando las conversaciones de los que están despiertos, cuando uno duerme deja de hacer muchas cosas que solo se hace despierto…
Para amar el corazón debe despertar, y para conocer lo sobrenatural el espíritu debe despertar..
¿Te has dado cuenta que tu espíritu está despertando ahora?
En cantares no habla solo de despertar sino también de levantarse, abrir los ojos, ponerse en pie e ir a donde Dios nos mande y hacer lo que él nos pida..
"Levántate, amor mío;
anda, cariño, vamos.
"Paloma mía, que te escondes en las rocas,
en altos y escabrosos escondites,
déjame ver tu rostro,
déjame escuchar tu voz.
¡Es tan agradable el verte!
¡Es tan dulce el escucharte!"
La mirada sobrenatural de Dios se deleita en ti y sus oídos en escuchar tu voz.
Despierta tu espíritu, levántate, alza tu rostro, habla con él…
